¿Quiénes son tus verdaderos amigos?

Últimamente ha habido muchísima polémica en todos lados con respecto a las diversas situaciones que se dan en nuestro querido México. Deslindo a Trattoria La Pasta y sus integrantes de esta opinión y aclaro que es mía únicamente. 

Eso nos lleva a pensar en las bases de la amistad. En toda forma de filosofía se ha hablado de amistad, Aristóteles habló de ella, el cristianismo también, en la sociología más moderna también se habló, incluso en el psicoanálisis está el tema de la amistad, porque los amigos son parte integral del ser humano. 

En este caso, iremos a Aristóteles y dejaremos de lado las corrientes de pensamiento más nuevas. Aristóteles habla de tres tipos de amistad: Por interés, por placer y por virtud. La primera todos la conocemos, es la amistad en la que la base es el interés mutuo, como las del trabajo y demás. Esas no trascienden. Ahora, lamentablemente, el más frecuente tipo de amistad es la segundo, la que tiene como origen, el placer. Es triste darnos cuenta de que la mayoría de las personas consideran tener montones de amigos sin darse cuenta de que quien tiene muchos amigos no tiene ninguno. 

Lo repito: Quien cree tener muchos amigos, tiene la desgracia de jamás haber tenido ninguno. Amigos por placer hay en todos lados, porque la base es el interés común y el deseo de divertirse juntos, eso no quiere decir que no puedan quererse o tenerse aprecio, pero no es un verdadero aprecio de amistad porque no está orientado a nada más que el placer. Lo quieres porque esa persona te trae buenos recuerdas. 

Hagamos un ejercicio para demostrarlo: Piensa en la persona que consideres tu mejor amigo, tu hermano del alma; menciona tres características que lo definan en su alma, ser buena persona no es una, ni tener sentimientos bonitos o cosas estúpidas del estilo, reconocer sus defectos tampoco cuenta. 

Una buena característica sería, por ejemplo, describir qué lo hace único como ser humano. Te explico: Ser buena persona es algo tan vago y general que lo puedes decir de casi cualquier persona. En su lugar, decir: Lo que hace único a mi mejor amigo es que tiene una visión particular del mundo donde la entrega por los demás constituye algo importante, porque él fue educado de x manera que lo llevó a ser de x modo. Esto te estrellará ante una terrible realidad: No cualquiera puede ser tu amigo, no sólo porque no sean compatibles, sino sencillamente porque podrías no estar listo tú ni él, una persona que no se conoce así misma no puede darse a conocer a alguien más. 

Aristóteles también cree que en la verdadera amistad lo más importante es el estar juntos, simple y llanamente eso. En ese sentido, sería mejor estar en una tormenta juntos que en la mejor aventura del mundo separados. Implica no concebir el mundo sin ellos. Si te imaginas con ellos en la playa o viajando a Roma, eso no implica que tienes un verdadero amigo y que no concibes el mundo sin ellos, solamente implica que, en efecto, siempre que los ves contigo es en algo placentero. Seré fuerte, piensa en la muerte de tu madre ¿Te los imaginas ahí? No ¿Verdad? Bájale un poco a la intensidad, si tu trabajo te aburre ¿Te los imaginas ahí? ¿Podrías pasarla bien con tu amigo simplemente trabajando? Sin pedir comida, sin beber, simplemente trabajando juntos. 

Si la respuesta es no, entonces no tienes un amigo de verdad, si la respuesta es sí, pruébalo ti mismo. No deseo terminar esto diciéndote que tu amigo y tú no son verdaderos amigos, porque probablemente no hayas respondido satisfactoriamente esto, tampoco deseo decirte que la parte que más amas de tu amigo es la oxitocina que liberas al estar con él. En su lugar, te diré ¿Por qué no te propones la verdadera virtud? Con mucha gracia, quizá mueras teniendo un amigo de verdad.